Esta nota no pretende dar una respuesta, pero si esboza de un forma interesante la problemática en la que estamos inmersos día a día quienes acompañamos a un niño que puede aprender, pero de otra manera que la mayoría. Entonces esto ya genera un gran conflicto para todos los agentes educativos de una institución. ¿Se pueden permitir los docentes disfrutar de los progresos de sus alumnos en base a sus adaptaciones, estrategias, recursos, excepciones, cuidados? Si pudieran hacerlo corriéndose de mandatos rígidos ejercerían con mayor libertad el rol educativo y comprenderían que son parte de la solución de estas problemáticas. Claro que todos los que estamos en el tema tenemos que ayudarlos, brindarles nuestros conocimientos, no juzgarlos a la ligera, comprenderlos. Esperemos que la capacitación para enseñar en la diversidad pase a ser parte de lo obligatorio en la formación del docente.
http://www.lanacion.com.ar/1523221-el-deseo-de-ensenar
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